DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos. – El corte de cables submarinos en el mar Rojo interrumpió el acceso a internet en partes de Asia y Oriente Medio, informaron expertos el domingo, aunque no estaba claro de inmediato qué causó el incidente.
Ha habido preocupación de que los cables sean blanco de la campaña en el mar Rojo de los rebeldes hutíes de Yemen, que describen como un esfuerzo para presionar a Israel a poner fin a su guerra contra Hamás en la Franja de Gaza. Sin embargo, los hutíes han negado en el pasado atacar esas líneas.
Los cables submarinos son una de las columnas vertebrales de internet, junto con las conexiones satelitales y los cables terrestres. Normalmente, los proveedores de internet cuentan con múltiples puntos de acceso y redirigen el tráfico si uno falla, aunque esto puede ralentizar el servicio para los usuarios.
Múltiples cables cortados cerca de Arabia Saudita
Microsoft anunció en su página de estado que Oriente Medio “podría experimentar mayor latencia debido a cortes en cables de fibra submarina en el mar Rojo”. La compañía, con sede en Redmond (Washington), no dio más detalles, aunque aseguró que el tráfico que no pasa por Oriente Medio “no se ve afectado”.
NetBlocks, que monitorea el acceso a internet, señaló que “una serie de cortes de cables submarinos en el mar Rojo ha degradado la conectividad en múltiples países”, incluidos India y Pakistán. Atribuyó las fallas a problemas que afectan a los sistemas de cable SMW4 e IMEWE cerca de Yeda, Arabia Saudita.
El cable South East Asia-Middle East-Western Europe 4 es operado por Tata Communications, parte del conglomerado indio. El cable India-Middle East-Western Europe es administrado por otro consorcio supervisado por Alcatel Submarine Networks. Ninguna de las dos empresas respondió a solicitudes de comentarios.
La empresa Pakistan Telecommunications Co. Ltd. informó en un comunicado el sábado que los cortes habían ocurrido.
Arabia Saudita no reconoció la interrupción y sus autoridades no respondieron a solicitudes de comentarios.
En Kuwait, las autoridades confirmaron que el cable FALCON GCX que atraviesa el mar Rojo había sido cortado, causando interrupciones en la pequeña nación petrolera. GCX no respondió a las solicitudes de información.
En Emiratos Árabes Unidos, hogar de Dubái y Abu Dabi, usuarios de internet en las redes estatales Du y Etisalat se quejaron de lentitud en la conexión. El gobierno no reconoció la interrupción.
Cables submarinos: accidentes y ataques
Las líneas submarinas pueden cortarse por anclas de barcos, pero también ser objetivo de ataques. Las reparaciones pueden tardar semanas, ya que un buque y su tripulación deben localizar y trabajar sobre el cable dañado.
Los cortes ocurren mientras los rebeldes hutíes de Yemen siguen con una serie de ataques contra Israel por la guerra en Gaza. Israel ha respondido con bombardeos aéreos, incluido uno que mató a altos líderes de ese movimiento.
A inicios de 2024, el gobierno yemení reconocido internacionalmente denunció que los hutíes planeaban atacar cables submarinos en el mar Rojo. Varios fueron cortados, posiblemente por un barco atacado por los hutíes que arrastró su ancla, aunque los rebeldes negaron ser responsables. El domingo por la mañana, el canal satelital hutí
al-Masirah reconoció los cortes, citando a NetBlocks.
Moammar al-Eryani, ministro de Información del gobierno reconocido internacionalmente y con sede en el sur de Yemen, emitió un comunicado asegurando que los cortes “no pueden separarse de la serie de ataques directos llevados a cabo por la milicia hutí”.
"Lo que ocurre hoy en el mar Rojo debería servir como una llamada de atención para la comunidad internacional, que debe tomar una postura firme para detener estas crecientes amenazas y proteger la infraestructura digital que es la columna vertebral del mundo moderno", dijo al-Eryani.
De noviembre de 2023 a diciembre de 2024, los hutíes atacaron más de 100 barcos con misiles y drones debido a la guerra entre Israel y Hamás en Gaza. En su campaña, hundieron cuatro embarcaciones y mataron al menos a ocho marineros.
Los hutíes detuvieron sus ataques durante una breve tregua en la guerra. Más tarde fueron blanco de una intensa campaña de bombardeos aéreos de varias semanas ordenada por el presidente estadounidense Donald Trump, antes de que declarara alcanzado un alto al fuego con los rebeldes. Los hutíes hundieron dos embarcaciones en julio, matando al menos a cuatro tripulantes, con otros presuntamente retenidos por ellos.
Los nuevos ataques de los hutíes se producen en un momento en que un posible alto al fuego en la guerra Israel-Hamás sigue en el aire. Mientras tanto, el futuro de las conversaciones entre EE. UU. e Irán sobre el debilitado programa nuclear de Teherán está en entredicho después de que Israel lanzara una guerra de 12 días contra la República Islámica, en la que los estadounidenses bombardearon tres sitios atómicos iraníes.