1. Por qué es importante
Muchos adultos atribuyen las molestias en la parte baja de la espalda a un tirón muscular o a una mala postura. Sin embargo, este dolor a veces puede ocultar un problema más grave: un trastorno renal. Los riñones, ubicados justo debajo de las costillas, suelen simular dolores de espalda, pero un diagnóstico equivocado puede provocar complicaciones graves más adelante.
2. ¿Dónde duele?
- Dolor muscular/espalda: Aparece en la zona lumbar (justo por encima de las caderas). Suele intensificarse al moverse, levantar peso o girar.
- Dolor de riñón: Se siente más arriba, en el costado (debajo de las costillas, junto a la columna). A menudo en un solo lado, a veces en ambos. Puede irradiarse hacia la ingle, abdomen bajo o muslos. No mejora con estiramientos o masajes.
3. ¿Cómo se siente?
- Dolor de espalda: Suele ser sordo, palpitante o molesto; puede incluir espasmos.
- Dolor de riñón: Normalmente es agudo, punzante o una molestia profunda. Los cálculos renales causan oleadas de dolor intermitente, mientras que las infecciones provocan un dolor constante. No mejora con descanso o calor.
4. Atento a las señales de alarma
El
dolor muscular o de espalda raramente se acompaña de otros síntomas generales. Pero el
dolor de origen renal frecuentemente sí:
- Fiebre, escalofríos, náuseas, vómitos
- Cambios al orinar: dolor, urgencia, frecuencia o variación en el flujo
- Orina turbia o con mal olor
- Presencia de sangre en la orina
- Cansancio extremo, dolor pélvico o sensibilidad en el costado
Estas señales pueden indicar infecciones o cálculos renales que requieren atención médica inmediata.
5. Trastornos renales comunes que causan dolor
- Cálculos renales: Dolor intenso y repentino que se desplaza del costado a la ingle, a menudo con náuseas y sangre en la orina.
- Pielonefritis (infección renal): Dolor agudo en el costado, fiebre, ardor al orinar y malestar general.
- Enfermedad renal crónica: Dolor bajo de tipo sordo y constante en el costado, que suele pasar desapercibido hasta fases avanzadas.
6. Hidratación: el factor común
Mantenerse bien hidratado protege tanto los músculos como los riñones. La deshidratación afecta la circulación (causando calambres musculares) y concentra la orina (favoreciendo la formación de cálculos e infecciones).
7. Estrategias de prevención
- Practicar actividad física regular como caminar, nadar o andar en bicicleta.
- Realizar ejercicios específicos (puentes de glúteos, basculaciones pélvicas) para fortalecer el tronco y reducir la tensión lumbar.
- Beber suficiente agua, llevar una dieta equilibrada y acudir al médico ante fiebre, cambios en la orina o fatiga inexplicada.
8. Cuándo acudir al médico
Busca atención médica si el dolor en la espalda o costado se acompaña de:
- Fiebre o escalofríos
- Náuseas o vómitos
- Dolor al orinar
- Cambios notables en la orina (turbidez, mal olor, sangre)
- Dolor repentino e intenso, o hinchazón en ojos o tobillos
- Cansancio persistente
9. Conclusión
- Dolor de espalda: Suele ser muscular o de la columna, mejora con movimiento o reposo.
- Dolor de riñón: Se localiza más arriba, no cede con cambios de postura y suele acompañarse de síntomas generales.
No te autodiagnostiques: si el dolor va acompañado de otras señales, consulta con un profesional. Pruebas como análisis de orina, de sangre o estudios de imagen ayudarán a identificar la causa y a tratarla a tiempo.
Escucha las señales de tu cuerpo: lo que parece un simple dolor de espalda puede ser una alerta de tus riñones.El fin del Artículo