La madrugada de este viernes la tierra volvió a moverse en la zona fronteriza entre México y Guatemala. Un sismo de magnitud 5.8 se sintió en varias comunidades, causando susto, desvelo y que más de uno saliera corriendo a la calle
“por si las dudas”.Según los primeros datos, el temblor fue profundo, así que aunque estuvo fuerte, no provocó el mismo nivel de daños que uno más superficial. Aun así, en pueblos de Chiapas y del lado guatemalteco mucha gente dijo haber sentido un
“jalón” que hizo vibrar puertas, ventanas y hasta los tinacos del techo.
Vecinos comentaron que el movimiento los agarró a mitad de la noche:
- “Se oyó como un trueno y luego empezó a temblar. Yo pensé que era un camión pasando, pero no, era la tierra moviéndose”, contó una habitante de Ciudad Cuauhtémoc.
- Otros aseguran que el sismo estuvo “corto pero intenso”, suficiente para ponerlos alerta.
Hasta el momento, autoridades de ambos países no han reportado daños mayores ni personas heridas, pero recomendaron a la población revisar sus casas, especialmente paredes agrietadas o techos viejos, y mantener listas las mochilas de emergencia
“por cualquier cosa”.La región es conocida por su actividad sísmica, así que para muchos esto no es nuevo; aun así, nunca deja de causar nervios cuando el piso empieza a temblar. La gente espera que no vengan réplicas fuertes y mantiene la calma mientras continúa la vigilancia.