La imputación del exasesor de Seguridad Nacional John Bolton por el manejo de información clasificada ha despertado comparaciones con la saga legal de Donald Trump, quien enfrentó acusaciones similares tras abandonar la Casa Blanca.
Bolton, quien trabajó en la administración Trump antes de ser despedido en 2019, está acusado de transmitir ilegalmente información clasificada a dos familiares sin autorización de seguridad y de conservar copias de esos documentos en su residencia de Maryland. Los cargos surgieron tras un allanamiento del FBI en su casa y oficina de Washington en agosto.
Trump, en cambio, fue acusado de retener ilegalmente documentos clasificados en su residencia de Mar-a-Lago después de dejar el cargo en enero de 2021. Los fiscales afirmaron que obstruyó los intentos de recuperarlos, guardando cajas de información sensible en lugares inseguros como un salón de baile e incluso un baño. Sin embargo, ese caso fue desestimado tras su victoria electoral en 2024.
Similitudes en los casos
Ambos hombres son acusados de manejar información sensible de defensa nacional fuera de los canales autorizados. Bolton supuestamente envió documentos mediante correos electrónicos personales y aplicaciones encriptadas, mientras que Trump almacenó archivos físicos en espacios inseguros.
Cada uno también enfrentó múltiples cargos de retención no autorizada: Bolton con 8 cargos, Trump con 38 cargos. Ambos habían criticado públicamente a otros por el mal manejo de información clasificada — Trump a Hillary Clinton en 2016, y Bolton a funcionarios de Trump en 2025 — lo que, según los fiscales, demuestra que conocían las reglas que luego infringieron.
Principales diferencias
La diferencia clave está en las acusaciones de obstrucción. Trump fue acusado de conspirar para ocultar documentos y engañar a los investigadores. Bolton, en cambio, solo fue acusado de transmisión no autorizada a familiares, sin cargos de obstrucción.
Otra diferencia es el momento político. El caso de Trump colapsó tras su regreso a la presidencia en 2024, mientras que una investigación previa contra Bolton fue archivada en 2021 con la llegada de Joe Biden al poder. La nueva imputación revive esas acusaciones bajo un clima político distinto.
Desde la Oficina Oval, Trump desestimó el caso calificando a Bolton de “mala persona” y “tipo malo.” Se espera que Bolton se entregue a las autoridades federales en Maryland tan pronto como este viernes.
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