Si pensabas que el ciclismo era cosa de otros países, Isaac del Toro llegó para romper ese mito. Este joven de 21 años, originario de Ensenada, Baja California, se convirtió en 2025 en la sensación del ciclismo mundial, y lo hizo a base de puro esfuerzo, sudor y pedal.
Un año de locura sobre ruedas
El 2025 fue un año de no creer: Del Toro ganó 16 carreras en distintos rincones de Europa, y se subió al podio del Giro de Italia, nada menos que siendo subcampeón y primer mexicano en portar la maglia rosa durante varias etapas. Imagínate la escena: un chavo mexicano, con su casco y su bici, liderando una de las vueltas más prestigiosas del mundo… ¡puro orgullo pa’ la bandera!
Además, metió victorias en la Milano‑Torino, el Tour de Austria y otras clásicas importantes. Cada sprint, cada escalada, fue un recordatorio de que México también puede brillar en ciclismo, y que el talento de barrio, con disciplina, llega lejos.
Reconocimiento en casa
No pasó desapercibido: Isaac se llevó el Premio Nacional del Deporte 2025 y fue nombrado Ídolo Deportivo del Año. La prensa, los fans y hasta los compas de su barrio lo celebran, porque ya no es solo “otro deportista”, es un símbolo de que se puede con talento y corazón.
Lo que representa
Ver a un mexicano liderando vueltas, ganando etapas y metiéndose en la historia rompe esquemas. Muchos chavitos que solo pensaban en fútbol ahora quieren bici, entrenan duro y sueñan con el pelotón europeo. Del Toro demuestra que con huevos, constancia y pasión, se puede competir al más alto nivel.
Isaac del Toro pasó de pedalear por las calles de Ensenada a ser orgullo nacional y sensación internacional, y este solo es el comienzo de lo que promete ser una carrera de impacto global.
El fin del Artículo