El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, condenó el miércoles el ataque terrorista en Bondi Beach de Sídney y ofreció sus condolencias a Australia tras el tiroteo masivo en una celebración de Hanukkah que mató al menos a 15 personas y dejó varias heridas.
Trump dijo: "Permítanme tomarme un momento para enviar el amor y las oraciones a la gente de Australia, especialmente a los afectados por el horrible y antisemita ataque terrorista que tuvo lugar en una celebración de Hanukkah en Sydney... "Instando a las naciones a que se solidaricen contra el terrorismo, agregó Trump: "Todas las naciones deben unirse contra las fuerzas malignas del terrorismo islámico radical".
El ataque del domingo, que ocurrió en la primera noche de las celebraciones de Hanukkah, se desarrolló durante una celebración a la que asistieron más de 1.000 personas.
Los testigos presenciales informaron del pánico cuando los dos pistoleros abrieron fuego desde un paso elevado cerca del evento. Las autoridades australianas confirmaron que el ataque fue un acto terrorista inspirado en la ideología del Estado Islámico.
Los sospechosos, identificados como el dúo padre e hijo Sajid Akram, de 50 años, y Naveed Akram, de 24, se dirigieron deliberadamente a los asistentes judíos. Sajid Akram fue muerto a tiros por la policía en la escena, mientras que su hijo Naveed permanece bajo vigilancia en el hospital. Los investigadores recuperaron material relacionado con el Estado Islámico, banderas caseras y artefactos explosivos improvisados del vehículo de los sospechosos, lo que llevó a los funcionarios a clasificar el ataque como motivado ideológicamente.
El primer ministro australiano, Anthony Albanese, dijo que los sospechosos habían sido radicalizados por "una ideología de odio" y que el ataque estaba destinado a ser un asalto masivo a la comunidad judía. La tragedia provocó la condena global.
El fin del Artículo