El excandidato presidencial Franco Parisi volvió a sacudir la política chilena. Tras quedar tercero en la primera vuelta, anunció que no apoyará a ninguno de los dos candidatos que siguen en carrera: Jeannette Jara, del Partido Comunista, y José Antonio Kast, de ultraderecha.
Su decisión importa, y mucho: Parisi sacó casi un 20% de los votos, una cifra enorme que puede definir quién será el próximo presidente.
“No me convence ninguno”
En una transmisión por redes, Parisi dijo que no confía en ninguno de los dos proyectos. Recalcó que su postura sigue siendo la misma de campaña: “ni comunista ni fascista”.
De Kast, comentó que es demasiado conservador y que sus posturas pueden terminar recortando libertades personales, especialmente en temas como derechos de las mujeres y de la comunidad LGBT.
De Jara, dijo que su programa económico se inclina hacia mucho control estatal, lo que a su juicio puede frenar el emprendimiento y espantar la inversión.
¿Qué harán sus votantes?
Parisi avisó que muchos de sus seguidores probablemente voten nulo, blanco o simplemente no vayan a votar. Según él, su base no se identifica con ninguno de los dos extremos políticos que están en la papeleta.
También aseguró que no está negociando cargos ni ministerios a cambio de respaldo, y que su postura es básicamente una señal de rechazo al “duopolio ideológico”.
Un voto que puede definirlo todo
La segunda vuelta será muy estrecha. Cualquier movimiento del electorado de Parisi podría inclinar la balanza hacia uno u otro lado. Por eso, su silencio y su negativa pesan más que un apoyo formal.
Su decisión también dejó un mensaje más amplio: mucha gente está cansada del mismo juego político de izquierda versus derecha, y busca opciones distintas, más prácticas y menos ideológicas.
El fin del Artículo